Mexicana aplica nano fitoquímica al desarrollo de productos sanitizantes
En México existen menos mil investigadores en nanociencia, una de las disciplinas que serán vitales para transitar de manera efectiva durante la nueva revolución industrial, y entre ellos se encuentra Gabriela León.
León es de las científicas visionarias que anticipó esta nueva era y desde hace dos décadas en Gresmex, aplicó la nano fitoquímica al desarrollo de productos sanitizantes de amplio espectro.
Gresmex recibió dos reconocimientos importantes: el Premio Shimon Peres a la Innovación en la categoría de Salud otorgado por Fundación ILAN Israel-Latin American Network y, la publicación en la revista de la Sociedad Internacional de Nanociencia y Nanotecnología, que avala la efectividad y seguridad contra el SARS CoV-2.
La efectividad y seguridad de la formulación de nano fitoquímica aplicada ha sido reconocida nacional e internacionalmente a lo largo de los años.
“La nano biomolécula que desarrollé y logré incluir en el portafolio de productos Éviter, elimina de manera efectiva, segura y sustentable a un espectro de más de 50 patógenos, entre virus – incluido el SARS CoV-2-, bacterias, micobacterias y hongos que son una amenaza contra la salud humana. La efectividad de este componente ha sido avalada por prestigiosos laboratorios del mundo y, en la práctica, también se ha comprobado al contener epidemias como la del ébola en Liberia y ahora el COVID- 19”, dijo Gabriela León, en el marco del Día Mundial de la Innovación que se conmemora cada 21 de abril.
El estudio publicado en el Journal of Nano Research, sienta las bases de la necesidad de que los consumidores estén informados sobre los alcances y riesgos reales de los sanitizantes que ocupan de manera personal y en el hogar, pues sustancias como el cloro, glutaraldehido, la clorhexidina y en especial, las sales cuaternarias de amonio, contenidas principalmente en desinfectantes en aerosol, contaminan el medioambiente y ponen en riesgo la salud humana al ser altamente cancerígenas.
México se ubica en la posición 55 de 132 del último ranking global de innovación que anualmente desarrolla la OMPI Organización Mundial de la Propiedad Intelectual y en el Top 3 de Latinoamérica, una región caracterizada por no contar con los niveles mínimos de inversión y recursos necesarios para favorecer esta actividad, que en promedio se estiman de al menos el 1% del PIB.
Si bien México ocupa una segunda posición en la región Latina, superado por Chile 53 y seguido por Costa Rica 56, el estudio remarca la necesidad de mejorar la calidad de las instituciones y de la infraestructura con la que cuenta el país.
